En épocas de bonanza las estructuras de gestión de los creadores escénicos se amplían para abarcar y controlar directamente nuevos ámbitos de su actividad. Las administraciones públicas lo han favorecido a partir del discurso dominante que considera las artes escénicas como un sector industrial y como tal conformado por empresas culturales eficientes y, por tanto, mercantiles. Además, este ha sido un requisito inamovible para recibir ayudas públicas para compañías. El precario desarrollo de formas legales para organizaciones sin ánimo de lucro en España ha convertido la mayoría de los artistas escénicos en empresarios y al sector de las artes escénicas en un conglomerado de empresas del más puro estilo de la gestión mercantil.
Por supuesto el espacio para empresas mercantiles en el sector de las artes escénicas existe y, como tales, tienen capacidad de crear riqueza y crecimiento económico. Con todo, estas deben asociarse a la industria del espectáculo. Así, las artes escénicas en lo que se refiere a la producción requieren dos tratamientos en relación a sus formas de gestión y jurídicas, de un lado las industriales y del otro las artístico-creativas. Seguir leyendo Soluciones a la Crisis desde las Artes Escénicas (II): Nuevos Modelos de Estructuras de Gestión